Pela pena de José Miguel Arruego, o site espanhol "mundotoro.com" rende hoje homenagem ao matador português José Falcão, quando se cumpre o 40º aniversário da sua morte na arena de Barcelona, colhido pelo toiro "Cuchareto" (foto de cima) da ganadaria então denominada como Hoyo de la Gitana (hoje, Pilar Población). O texto do "mundotoro.com" é acompanhado pelo filme português "Homens e Toiros", realizado por Francisco Saalfeld. Com a devida vénia e sem traduzir, aqui reproduzimos o texto.
Madrid (España). La madrugada de hace
cuarenta años tiñó el toreo de luto. José Falcón, torero portugués de grandes
facultades, luchador, honesto y capaz, caía mortalmente herido en La Monumental
de Barcelona por un santacoloma de la ganadería entonces conocida como Hoyo de
la Gitana, hoy Pilar Población.
José Carlos Frita Falcão, que era su
nombre de pila, había nacido en Aldea de Povoas (Villa Franca de Xira) el 30 de
agosto de 1944. Sus orígenes taurinos hay que buscarlos en su tierra natal y en
la vecina Salamanca, donde fue acogido y adoptado y siempre gozó de cartel y
partidarios, sobre todo entre profesionales y ganaderos.
Allí preparó su presentación con
caballos en Las Ventas, fechada el 19 de marzo del 68 y saldada con el corte de
tres orejas, que Falcón paseó bajo la mirada de Bienvenido Luján y Gregorio
Lalanda, sus compañeros de cartel.
Ese mismo año en la Feria de San Juan de
Badajoz recibió el doctorado de manos de Paco Camino, que en presencia de
Paquirri le cedió el toro Norteño, de Cunhal Patricio, astado que abrió una
trayectoria digna y honrada, regada además con serios percances.
Porque su manera gallarda y auténtica,
sin perder la compostura ni la sonrisa, que Falcón tenía de hacer frente a los
astados, le granjeó el respeto de la afición y la crítica, que valoró y ponderó
sus éxitos con las corridas más duras de cada feria en la que tenía la
oportunidad de entrar.
Después de confirmar en Madrid en el
verano del 69, buscó con ahínco y fe una consolidación en las ferias, que, pese
a su solvencia con el ganado más exigente, no acababa de llegar. Uno de los
triunfos más sonados de su trayectoria aconteció en la Aste Nagusia bilbaína
frente a un duro encierro de Miura, un año antes de su fallecimiento.
Aquel 11
de agosto, Falcón hizo el paseíllo en Barcelona (otra tierra a la que estaba
muy vinculado por su matrimonio con Rosa Gil, propietaria del restaurante
taurino Casa Leopoldo, con quien tuvo una hija póstuma) junto al rejoneador Álvaro
Domecq y Manolo Cortés. El tercero de la tarde, Cuchareto, propiedad de alguien
que siempre apostó y creyó en él como Fernando Pérez Tabernero, segó de un
certero navajazo en el muslo la vida de un torero que se ganó el afecto, la
simpatía y el respeto de cuantos le trataron.
En el video que acompaña este texto,
perteneciente a la serie portuguesa Homens e Touros, se puede ver al malogrado
torero en la plaza lisboeta de Campo Pequeno, junto a toreros como Mario Coelho
o Ricardo Chibanga, que junto a Falcón impulsaron y engrandecieron el toreo a
pie lusitano además de alumbrar a la gran figura portuguesa de los años
venideros: Víctor Mendes.
Fotos "El Ruedo" e D.R.